Todavía lo veo venir saliendo de la cancha: Por la calle del bosque en Gimnasia, por el pasaje corbata en Avellaneda, por el playón de estacionamiento en River y San Lorenzo, también en el estadio de La plata... En cada cancha siempre mezclado con la gente amado y respetado como ninguno siempre dispuesto a la foto el autógrafo o el apretón de manos siempre respirando fútbol Con el paso apurado, chueco y el chasis propio de las batallas deportivas Con esa pinta que cada día era mas. La sonrisa ancha y pícara, la camisa afuera que yo mismo adopté para imitarlo. Qué varón de nuestra época no quiso imitar a Perfumo Ese momento del encuentro, pasada media hora de finalizado el partido, Roberto la hacía aparecer como si hicieran meses que no nos veíamos y acababa de dejarlo en la cancha hacía tres o cuatro horas. Roberto tenía un chofer asignado pero cuando Daniel, el chofer asignado, no estaba disponible me tocaba llevarlo por su trabajo de comentarista. Es que nos conocíamos de muchos años... de cuando tenía la fábrica de ropa en Charlone. Como yo también cargo mis años solíamos recordar a jugadores y equipos de nuestra época es que habíamos compartido la mesa del café en El Volante de Charlone y Lacroze un bar con historia donde supo parar Carlitos Balá y Jorge Luz entre otros. Cierro los ojos y lo veo salir de Quintana y Callao siempre cargando esa sonrisa de amar y honrar la vida... como hace calor pone el saco en el asiento de atrás, bien estirado y prolijo para que no se arrugue y sube en el asiento del acompañante. Qué pinta Dios... los que pasan te miran y yo me siento el mas importante de los seres, siento como que me envidian por tener semejante personaje como compañía. Yo no puedo decir que fui amigo de Roberto, en su vida seguramente hubo cientos de personas allegadas como mi caso. Pero es que el sabía tratar a todo el mundo con una educación, humildad y respeto que te hacía sentir amigo. Roberto no solamente nos regaló excelencia deportiva yo creo que inventó la figura del ídolo humanizado. Perfumo solía decir que el fútbol se había transformado en una religión y no se equivocaba. Recuerdo en una charla como hacía reflexión de millares de personas que sabían que no iban a poder entrar al estadio pero estaban en cercanías del mismo porque jugaba la selección Argentina en el último mundial en Brasil y me repetía “Héctor el fútbol es como una religión” mirá esa gente que viajó a Brasil sin la mas mínima posibilidad de entrar al estadio y está mirando los partidos en una televisión en la calle cuando podría estar en su casa, es que la cercanía geográfica con el evento los hace sentir fieles y devotos a su creencia esto es religión. Tremendamente inteligente su analogía, es que el supo el valor de ser amado por los hinchas y le dolía devolverles con su juego, “Enjundia” como le gustaba decir, su parte de ese amor intrínseco
Roberto patentó el “Abrazo de Gol”, los que tuvimos la suerte de compartir con el sabemos del alcance inmensurable de esta frase. En lo personal, y tengo la certeza de que también con el resto, Roberto no hablaba de su esposa ni de su hijo... el hablaba de Mabel y Gustavo. Yo los vi dos veces o tres en 30 años pero su virtud de ser honrado era tan grande que los nombraba como si fueran parte del escenario. No importa si estábamos en una charla de viaje a la cancha era como que estábamos compartiendo la familia. Obviamente yo también hablaba de la mía, hasta compartíamos actitudes frente a nuestros hijos y el narraba con orgullo los estudios de su hijo. Un día me comentó que Mabel perdió o le sustrajeron una lap-top con información relacionada a su trabajo y yo le respondí... pero Roberto no hizo ningún Back-Up de la información... jaja Bacci que se yo. Mirá a mi me piden que mande mis comentarios en formatos de texto electrónico para su publicación y yo les respondo que “Yo hablo de fútbol” no se ni donde está la a en el teclado si yo pierdo tiempo tratando de escribir a máquina pierdo el hilo de mi inspiración... te lo escribo a mano y te lo mando por fax el resto hacélo vos. Este era el verdadero Roberto Perfumo... el mejor en la cancha y difícilmente superable en la vida. Así como alguien escribió un libro sobre la vida de Macoco Unzué, que también supo parar en “La Biela” tal vez alguien tenga el valor de eternizar a Roberto Perfumo en una publicación semejante. Querido Roberto: Tenía necesidad de decir esto, con la humildad que merece recordarte. Algún día nos veremos “En la otra Vida” Héctor Bacci
Los Seniors de River Plate y Racing disputaron la Copa Roberto Perfumo organizada por la Mutual del Futbolista en homenaje al supercrack recientemente fallecido
Todavía lo veo venir saliendo de la cancha: Por la calle del bosque en Gimnasia, por el pasaje corbata en Avellaneda, por el playón de estacionamiento en River y San Lorenzo, también en el estadio de La plata... En cada cancha siempre mezclado con la gente amado y respetado como ninguno siempre dispuesto a la foto el autógrafo o el apretón de manos siempre respirando fútbol
ResponderEliminarCon el paso apurado, chueco y el chasis propio de las batallas deportivas
Con esa pinta que cada día era mas. La sonrisa ancha y pícara, la camisa afuera que yo mismo adopté para imitarlo. Qué varón de nuestra época no quiso imitar a Perfumo
Ese momento del encuentro, pasada media hora de finalizado el partido, Roberto la hacía aparecer como si hicieran meses que no nos veíamos y acababa de dejarlo en la cancha hacía tres o cuatro horas.
Roberto tenía un chofer asignado pero cuando Daniel, el chofer asignado, no estaba disponible me tocaba llevarlo por su trabajo de comentarista.
Es que nos conocíamos de muchos años... de cuando tenía la fábrica de ropa en Charlone.
Como yo también cargo mis años solíamos recordar a jugadores y equipos de nuestra época es que habíamos compartido la mesa del café en El Volante de Charlone y Lacroze un bar con historia donde supo parar Carlitos Balá y Jorge Luz entre otros.
Cierro los ojos y lo veo salir de Quintana y Callao siempre cargando esa sonrisa de amar y honrar la vida... como hace calor pone el saco en el asiento de atrás, bien estirado y prolijo para que no se arrugue y sube en el asiento del acompañante.
Qué pinta Dios... los que pasan te miran y yo me siento el mas importante de los seres, siento como que me envidian por tener semejante personaje como compañía.
Yo no puedo decir que fui amigo de Roberto, en su vida seguramente hubo cientos de personas allegadas como mi caso.
Pero es que el sabía tratar a todo el mundo con una educación, humildad y respeto que te hacía sentir amigo.
Roberto no solamente nos regaló excelencia deportiva yo creo que inventó la figura del ídolo humanizado.
Perfumo solía decir que el fútbol se había transformado en una religión y no se equivocaba.
Recuerdo en una charla como hacía reflexión de millares de personas que sabían que no iban a poder entrar al estadio pero estaban en cercanías del mismo porque jugaba la selección Argentina en el último mundial en Brasil y me repetía “Héctor el fútbol es como una religión” mirá esa gente que viajó a Brasil sin la mas mínima posibilidad de entrar al estadio y está mirando los partidos en una televisión en la calle cuando podría estar en su casa, es que la cercanía geográfica con el evento los hace sentir fieles y devotos a su creencia esto es religión.
Tremendamente inteligente su analogía, es que el supo el valor de ser amado por los hinchas y le dolía devolverles con su juego, “Enjundia” como le gustaba decir, su parte de ese amor intrínseco
Roberto patentó el “Abrazo de Gol”, los que tuvimos la suerte de compartir con el sabemos del alcance inmensurable de esta frase.
ResponderEliminarEn lo personal, y tengo la certeza de que también con el resto, Roberto no hablaba de su esposa ni de su hijo... el hablaba de Mabel y Gustavo. Yo los vi dos veces o tres en 30 años pero su virtud de ser honrado era tan grande que los nombraba como si fueran parte del escenario. No importa si estábamos en una charla de viaje a la cancha era como que estábamos compartiendo la familia. Obviamente yo también hablaba de la mía, hasta compartíamos actitudes frente a nuestros hijos y el narraba con orgullo los estudios de su hijo.
Un día me comentó que Mabel perdió o le sustrajeron una lap-top con información relacionada a su trabajo y yo le respondí... pero Roberto no hizo ningún Back-Up de la información... jaja Bacci que se yo.
Mirá a mi me piden que mande mis comentarios en formatos de texto electrónico para su publicación y yo les respondo que “Yo hablo de fútbol” no se ni donde está la a en el teclado si yo pierdo tiempo tratando de escribir a máquina pierdo el hilo de mi inspiración... te lo escribo a mano y te lo mando por fax el resto hacélo vos.
Este era el verdadero Roberto Perfumo... el mejor en la cancha y difícilmente superable en la vida.
Así como alguien escribió un libro sobre la vida de Macoco Unzué, que también supo parar en “La Biela” tal vez alguien tenga el valor de eternizar a Roberto Perfumo en una publicación semejante.
Querido Roberto: Tenía necesidad de decir esto, con la humildad que merece recordarte.
Algún día nos veremos “En la otra Vida”
Héctor Bacci
¡¡¡ Homenaje al Mariscal !!!
ResponderEliminarLos Seniors de River Plate y Racing disputaron la Copa Roberto Perfumo organizada por la Mutual del Futbolista en homenaje al supercrack recientemente fallecido
Resultado: River 3 Racing 1
por Eduardo Ruiz